Calificar esta democracia de "formal" es un insulto al pueblo argentino

El presidente de TELAM, Martín Granovsky, envió una carta al titular de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), Lauro Aliño.

Me dirijo a usted en mi carácter de presidente del directorio de TELAM Sociedad del Estado, que como otras agencias de noticias reviste carácter de socio adherente de ADEPA.

El motivo de esta carta es un párrafo incluido en el documento de ADEPA emitido el 24 de abril de 2009 en materia de libertad de prensa e información.

Dice el párrafo en cuestión: “Como muchos otros países de nuestro continente, la Argentina padece una baja calidad institucional. La vigencia de una democracia formal no alcanza a disminuir la falencia de su funcionamiento por defección de algunos de sus protagonistas”.

Creía que la expresión “democracia formal” estaba desterrada del vocabulario argentino, pero veo con asombro que sobrevive.

Si vivimos en una “democracia formal”, ¿eso quiere decir que la democracia argentina no es real?

La frase “democracia formal” está vinculada a una historia muy triste de la Argentina.

El nacionalismo integrista y de extrema derecha siempre criticó a la democracia como un régimen presuntamente formal y vacío, desprovisto en su secularidad de los valores absolutos típicos de los regímenes autoritarios o teocráticos. Por eso apoyó con entusiasmo los golpes de Estado.

Los golpistas que se definían a sí mismos como de cuño “liberal” también solían proclamar que su función histórica sería la reposición de una “verdadera” democracia.

La última dictadura se autotituló “Proceso de reorganización nacional”.

En la vieja tradición política de nuestro país, incluso sectores de la izquierda y de lo que hoy se llama centroizquierda acostumbraban criticar la supuesta formalidad de la democracia.

El argumento era que, como unas clases oprimían a otras, la democracia constituía una simple cáscara que disfrazaba los verdaderos intereses de los sectores dominantes en la sociedad y por lo tanto daba lo mismo vivir con esa cáscara que sin ella.

Aun sectores del nacionalismo de raigambre popular calificaban de “formal” a la democracia. Aludían así a la permanencia de profundas injusticias sociales aun en medio del régimen democrático.

Las críticas son diferentes, por supuesto, porque solo fueron los golpes los que de verdad acabaron con períodos democráticos.

Sin embargo, los cuestionamientos a la democracia colocándole peyorativamente adjetivos que la descalifican apuntan a presentar a la democracia como una máscara, un disfraz o una simple forma sin contenido alguno.

El gran cambio en esa manera de pensar se produjo a partir del 10 de diciembre de 1983, cuando terminó la última dictadura. No fue un cambio caprichoso. Este período democrático que vivimos hoy y que ya superó los 25 años es posterior a la dictadura más sistemáticamente cruel de la historia argentina, la que entre 1976 y 1983 mató, secuestró, torturó, falseó documentos, ocultó pruebas y robó bebés a sus padres en cautiverio.

La evaluación de esa dictadura como una tragedia inigualable llevó a la mayoría de los argentinos a un acuerdo implícito: de ahí en adelante, la democracia debía concebirse sin adjetivos que le quitaran valor. Debía ser un bien social inalterable y no un simple momento de la historia al que unos u otros tenían solo la obligación de tolerar. Quedaba claro, de una vez y para siempre, que la democracia era una casa común cuya destrucción, en el pasado, había significado la pérdida de derechos elementales, el primero de ellos el derecho a la vida y a la integridad física.

Así surgió una nueva cultura política y la palabra “democracia” perdió la compañía de los adjetivos que la descalificaban. Raúl Alfonsín en sus discursos como primer presidente democrático de la nueva etapa, el peronismo renovador, el centroderecha sin compromisos con la dictadura, la izquierda y la centroizquierda actualizadas, los organismos de derechos humanos, todos fueron construyendo esa nueva cultura.

Con sus más y sus menos, la Argentina vive desde 1983 un período profundamente democrático.

Tan democrático que logró sobrevivir a uno de sus grandes desafíos: a fines del 2001 y principios del 2002, el país superó institucionalmente y con madurez una crisis política, económica y social -- que fue también una crisis humanitaria, por sus muertos y sus desocupados -, que en otra etapa de la historia seguramente habría terminado con las propias instituciones.

Calificar esta democracia de “formal” es un insulto al pueblo argentino, al voto popular y a nuestros padres fundadores.

Afortunadamente la democracia es tan sólida que puede soportar hasta los peores insultos. Una evidencia más de que la libertad de expresión está firme como nunca.

NO SE TRATA DE TOMAR EL PODER, SINO DE DESMENBRAR EL PODER IMPERIAL EXISTENTE‏


NO SE TRATA DE TOMAR EL PODER, SINO DE DESMENBRAR EL PODER IMPERIAL EXISTENTE HOY EN LAS ORGANIZACIONES MAFIOSAS
Por Walter A. Moore
Una de las desventajas que tiene el Imperio Global es que su política es reconocible, es por ese motivo que debe desplegar una inmensa cortina de desinformación para que algo tan evidente permanezca invisible.“Dividir para reinar y saquear para sobrevivir”, esos son los objetivos estratégicos, y todo su poder está destinado a cumplirlos, sin tomar en cuenta el tiempo. Y eso es todo.
Es un tremendo desafío, ya que su enemigo es, nada menos, que toda la Humanidad.Pero, para mantenerse triunfante en esta lucha, es necesario estructurar un gran poder, y un poder multifacético, que abarque casi todos los aspectos de la realidad y que disponga de una sinergia que lo mantenga estable, tan estable, que se sostenga aún cuando aparece derrocado, por algún avatar de una Humanidad voluble, a la que no le gusta ser saqueada y oprimida para beneficio de unos pocas familias que atesoran poder generación tras generación.
Otra de las desventajas del Poder Imperial es que no puede separarse de su carácter arbolar y piramidal. Ese es su método para conservar la coherencia, con ella el control automático del funcionamiento social.
El Imperio pone en marcha sistemas, los programa y destina recursos importantes para ponerlos en marcha, y luego se despreocupa: los sistemas funcionan solos para controlar a las sociedades y mantener constante el saqueo, para desmantelar las posibles resistencias y, en general, para incrementar la dominación.
Es en este sistema de aplicación universal donde reside su fortaleza y donde se esconde su “Talón de Aquiles”, porque la Humanidad del siglo 21 no se regirá por los mismos principios que permitieron la dominación en los siglos anteriores.
Para usar los términos de Deleuze y de Guattari, en este período histórico estamos en el pasaje de una sociedad arbolar (piramidal) a una sociedad rizomática (o de redes), y eso condena a muerte al sistema de Poder Imperial Global, porque no puede controlar cada Nodo de una Red que se expande, se modifica y se complejiza permanentemente.
Así, las sociedades se defienden de la dominación, creando estructuras que no se ajustan al sistema arbolar controlante, y es entonces donde el Imperio busca desarrollan nuevos recursos para mantener la dominación, creando un conjunto cada vez más complejo de organizaciones mafiosas, que son genéticamente compatibles con el Sistema Imperial, pero que les permite transgredir las reglas que su propia estructura arbolar instala (por ejemplo el árbol de leyes subordinadas a la constitución y las instituciones subordinadas a las leyes y el funcionamiento social controlado por las instituciones).
Podemos decir que el incremento de las actividades mafiosas es proporcional a la pérdida de prestigio de las actividades imperiales.
Y es así como el comportamiento mafioso contagia, desde el poder, a todas las otras instituciones que se comportan mafiosamente, cualquiera sea la actividad que desarrollen, sea la política, la música, el deporte, etc. , dando como resultado lo que Perón observó al volver del exilio: “el hombre argentino está destruido”.
La conformación de cualquier imperio en la sociedad industrial tiene orígenes mafiosos, pues surgieron de una combinación de actividades subversivas para debilitar a los poderes históricamente constituidos, para derrocarlo usaron el terrorismo, el espionaje, el tráfico de influencias para eventuales socios, actividades que combinaron con la usura y/o diferentes formas de robo,, y guerra abierta, todas destinadas a conformar lo que nuestros políticos llaman “Hacer caja”.
Dada esta estructura del Poder Imperial, la pretensión marxista de “Tomar el Poder”, no tuvo nunca otro corolario posible que el fracaso, porque es la estructura de dominación la que define el poder y no la ideología con la que esta estructura se opera.
Es por ese motivo que el régimen soviético sólo pudo sustituir la estructura esquizofrénica del capitalismo por la estructura paranoica del comunismo, dos sistemas arbolares de ideologías diferentes, pero con un control social similar.
En un caso por burocracias seleccionadas por los dueños del poder económico y en el otro por burocracias seleccionadas por un partido político hegemónico.
En ambos casos la evolución mafiosa ha sido imposible de detener.
Si estas estructuras mafiosas no son desestructuradas, o sea partidas en pedazos controlables por las organizaciones del Pueblo, seguirán en el poder, cualquiera sea el régimen político en el cual operen, porque su cultura organizacional está establecida para servir a los designios imperiales: Sus objetivos, su forma de operar, su estructura jerárquica tienen una lógica intrínseca que sirve a los objetivos de la dominación, y mantenerlos implica la continuación de esas dominación, porque estos objetivos están instalados de manera que parece que no hay forma de trabajar de otra manera.
Instalando esta percepción de la realidad, el Imperio ha logrado una gran victoria cultural sobre el resto de la Humanidad.
Para combatir las mafias incrustadas en el sistema productivo de nuestras naciones es necesario construir un nuevo tipo de organización productiva, en la cual los grandes recursos que puede desarrollar el Pueblo se articulen en redes productivas, que generen grandes volúmenes de producción en su conjunto, pero pequeñas en cada localización. Un sistema que permita que toda su producción se acople “simbióticamente” al medio ambiente en la cual se encuentra inserta.
El modelo de Microciudades Autosuficientes con su doble sistema productivo (autoabastecimiento e intercambio) es una solución de aplicación continental, configurando un sistema defensivo muy sólido ante las ofensivas imperiales, que debe ser combinado con la Integración Física de Suramérica y la creación de un sistema defensivo basado en la Guerra Asimétrica, considerando como parte de las tropas enemigas a todo sistema mafioso incrustado en nuestras sociedades.
El modelo político de la EcoDemocracia has sido diseñado con esta misma finalidad, basándose en principios y estructuras vigentes en nuestro continente desde épocas ancestrales, adecuados a las necesidades de la sociedad post-industrial.
LA DIMENSIÓN DEL PODER IMPERIAL ORGANIZADO MEDIANTE ESTRUCTURAS MAFIOSAS
Desde que cayera el Muro de Berlín, la ferocidad de la Cuarta Guerra Mundial, o sea la Guerra del Imperio Global contra el Tercer Mundo ha aumentado continuamente. Si bien los titulares de los medios (controladas en una gran medida por el Sistema Imperial) toman nota solamente de la Guerra Física de Alta Intensidad, el despliegue principal de esta Guerra no está confiado solamente al Pentágono, sino conjunto de entidades mafiosas que opera el imperio, muchas de las cuales son operadas desde el Complejo Militar Industrial que conforma el Pentágono.
Estas organizaciones pueden dividirse en dos grandes grupos: Las Mafias de Superficie y las Mafias Insidiosas, o formalmente ilegales.
LAS MAFIAS DE SUPERFICIE O MAFIAS LEGALES
La Mafia Bancaria es la más efectiva en su capacidad para operar en la superficie es, está integrada por los que el Presidente Roosevelt llamaba “Bangsters” , que han estafado a toda la Humanidad, por un monto que, una de las estructuras de esa misma mafia, el FMI, estima en 8.000.000 de millones de dólares, nada más que en los préstamos incobrables emitidos, usando básicamente los recursos de los fondos de jubilaciones y pensiones, como así también el dinero invertido en acciones.
Los bancos centrales de prácticamente todo el mundo son controlados por esta mafia, y nuestro país no es una excepción, y todo nuestro sistema bancario, y en especial el Banco Central, es totalmente funcional al Sistema de Dominación Imperial pues no emite los recursos necesarios para impulsar el desarrollo productivo que nuestro país necesita desesperadamente.
Esta mafia, al ser una mafia de superficie, puede combatirse con medios considerados “políticamente correctos” para el sistema de dominación, utilizando el hecho de que todos los bancos está quebrados por su ineficiencia (mejor dicho, por su eficiencia para robar a sus clientes), el sistema se corrige exponiendo su realidad contable y haciendo que respondan por sus quebrantos los bienes de los accionistas y directivos.
Después de esta operación inicial, todo el sistema bancario y financiero debe ser rediseñado para que cumpla las funciones sociales necesarias para un funcionamiento racional del sistema económico, para lo cual se debe prohibir el funcionamiento cualquier entidad financiera manejada por accionistas privados o grupos mafiosos.
La participación en organizaciones mafiosas debe ser el delito más controlado y más severamente castigado en una sociedad libre, justa y soberana, y todas las organizaciones deben ser observadas para develar si existen comportamientos mafiosos en su sistema de operar, y obligar a su reestructuración si así fuera.
Las Mafias Graneleras, también tienen una estructura globalizada, y tienen relaciones intrincadas con las Mafias Energéticas y Monetarias, pues “El cereal es la divisa de la divisas”, decía Lenin.
Si bien se pueden encontrar fuentes alternativas de energía, no existen alternativas a las cosechas de alimentos, en las cuales los granos son una parte central.
“El cereal es el único recurso del mundo más importante que el petróleo” afirma Dan Morgan en su libro Los Traficantes de Granos, uno de los pocos que revela cómo funcionaba este negocio casi totalmente en manos de cinco compañías: Cargill, Continental, Luis Dreyfus, André y Bunge & Born.
Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos aparece como la gran potencia cerealera, pero es en 1975 las malas cosechas en la Unión Soviética la impulsaron al primer lugar como proveedor de cereales para todo el planeta.
La “Cinco Hermanas” de los traficantes de granos mantuvieron el control de todo el negocio hasta la década de 1980, cuando ingresa como un nuevo jugador, que forma parte del Complejo Militar Industrial, y tiene objetivos diferentes que el de obtener la máxima ganancia posible, como las graneleras tradicionales.
Para el complejo grupo de empresas que el Pentágono agrupó alrededor de Monsanto (Cargill es una de estas), y que conforman un vasto dispositivo que incluye el desarrollo de semillas patentadas, producción masiva de productos químicos, y un gigantesco dispositivo propio destinando al tráfico de granos, que incluye silos y elevadores, puertos, barcos y una estructura bancaria y aduanera ad oc, todo esto apoyado por enormes recursos financieros y todo el peso político del Imperio Norteamericano.Para el Pentágono, la participación en el negocio granelero es parte de su dispositivo bélico, destinado, por una parte, a consolidar su capacidad logística y desarticular la de los países invadidos y por otra, a consolidar su rol como Reyes Mundiales de la producción de granos, un recurso de poder, tanto en tiempos de guerra como de paz.
Así, el sistema del Complejo Militar Industrial, ha organizado a las Mafias Graneleras, como una parte fundamental del sistema de saqueo y de control político global, y si bien sus intereses no suelen aparecer como protegidos por las flotas imperiales en los diarios, eso no se debe a que no suceda, sino a que estos grupos son mucho más reservados y tienen un perfil muchísimo más bajo que, por ejemplo, las mafias petroleras o bancarias.
Y eso quiere decir, que tienen más poder que ellos, y aunque nunca aparecen financiando golpes de Estado, siempre son los grandes beneficiarios de estos y de los cambios electorales.
En este momento en la Argentina, la gran batalla contra nuestro Pueblo está conducida por esta mafia, y es en esta batalla que, aunque no sea perceptible, se juega la vida de gran parte de la Humanidad, pues esta Mafia busca destruir nuestras praderas (y otras en el resto del mundo), para impedir que den alimento a centenares de millones de personas.
Su objetivo es convertirlas en desiertos gracias mediante ataques químicos (mediante el glifosato y otros agrotóxicos que destruyen la cadena de la vida), ataques biológico (a cargo de las semillas genéticamente modificadas) y ataques ambientales, al deforestar enormes superficies para plantar soja, con lo cual se modifica el clima y el régimen de aguas.
Este ataque, no sólo destruirá nuestro poder, sino que una parte importante de la Humanidad será destruida por el hambre, cumpliendo con otro objetivo del Imperio Global que consiste en reducir la población mundial a un sexto de la actual, pues a medida que crece la población, se hace más difícil controlarla .
Las Mafias Mineras pertenecen también a este circuito y su avance para instalar el saqueo ha sido tan lento como el proceso de extracción de nuestras riquezas.
Comienza con el golpe de estado de 1955, y estas bandas logran que se suprima la Constitución de 1949 mediante un bando militar, pues esa Constitución garantizaba que todos los recursos del subsuelo de nuestra Nación eran de propiedad exclusiva del Estado Argentino.
Su poder se consolida con el gobierno del Virrey Cavallo, que firma el Tratado de Paz de la Guerra de las Malvinas, donde en sus cláusulas secretas se entrega toda la minería argentina (la chilena ya la tenían, exceptuando al cobre) al Imperio Británico.
El tratado de Londres, que firma después este canalla, les garantiza el poder del Estado a sus inversiones, y la reforma de 1994 subordina las leyes argentinas a los tratados internacionales. Pero no conforme con eso, la mafia minera consigue que el Congreso Nacional apruebe la Ley 24.224, que fija cánones anuales para la exploración minera de 40 pesos por año y por mina, y la más vergonzosa aún, la Ley 24.474, que en los hechos, exime a las mineras de todo pago de impuestos y regalías, presentes o futuras.
¿Que es lo que se están llevando las 49 minas de oro instaladas por los británicos en nuestro país?.Para dar una referencia, el yacimiento del Cerro Vanguardia sólo produjo 220.000 onzas de oro en 2008, cuyo precio actual de mercado es de 3.500 pesos, o sea que ese oro vale 770 millones de pesos.
Pero como por cada onza de oro se extraen unas 230 onzas de plata, o sea que también se extrajeron 50.000.000 de onzas de plata, cuyo valor es de 35 pesos la onza lo cual suma otros 1.700 millones de pesos, o sea un total de 2.500 millones de pesos por año, por los cuales los argentinos recibimos de la empresas británica AngloGold Ashanti, solamente 16 millones de pesos anuales , o sea el 0,64% del valor de nuestros minerales irrecuperables, o sea NADA.
Estos datos salieron al luz por el extraño naufragio del Polar Mist, un barco pesquero que llevaba una carga de bloques de oro y plata, para purificar en Suiza, accidente que permite imaginar el volumen del robo que CADA AÑO nos propinan las mafias mineras, si de una sola mina se llevan 2.484 millones de pesos, podemos multiplicar esta cifra varias veces al computar los beneficios de las otras 48 minas entregadas.
Según la secretaría de Minería de Argentina, el país es en la actualidad el decimoquinto productor mundial de oro, y en 2011 será uno de los 10 mayores exportadores del metal.
De acuerdo con las cifras del gobierno, la producción de oro en Argentina aumentó de 21.000 onzas en 2003 a cerca de 1.350.000 onzas el año pasado, un crecimiento de más del 6000%. en el total de las 49 minas en funcionamiento. Pero conservando la proporción de plata, el volumen de plata extraído debería alcanzar a unos 300 millones de onzas de plata, que valen aproximadamente 10.500 millones de pesos que sumados a los 4.700 millones de pesos que extraen en oro, nos roban anualmente más de 15.000 millones de pesos, o sea unos 4.300 millones de dólares.Esto en oro y plata, tal como en los tiempos de la colonia.
Además de las 180.000 toneladas anuales de cobre que se generan en la mina La Alumbrera, por el cual no se pagan nada tampoco, legalmente claro, además de otros metales, como cromo que se envía como producto seco a procesar fuera de la argentina por empresas cuyas sedes centrales están todas en Inglaterra, pero que usan sucursales en Sudáfrica, Canadá, Australia, Nueva Zelandia y otros países vinculados al Commonwealth británico.
La bibliografía existente permite apreciarse el gigantesco daño ambiental que esta actividad produce.
Para dar una referencia, en el medio ambiente que circunda a las minas de oro, diariamente, se tiran 6 toneladas de cianuro de sodio, se utiliza un millón de litros de agua, se usan 400 kg de ácido clorhídrico; 400 kg de soda cáustica; 46 kg litargirio; 23.300 kg de cal; 2.500 kg de azufre.¡¡Todo esto los 365 días del año durante 10 años, en una sola mina!
!Esta situación es insoportable!, y como estos datos son públicos, debe correr un río de dinero mafioso para que no se controle a estos predadores.
Otra mafia de superficie es la Mafia Energética, que incluye tanto los recursos petrogasíferos, como la petroquímica, las redes y generadores eléctricos, en todas sus variables.
En nuestro país, entre otros “méritos”, estas empresas mafiosas globalizadas se han robado todos los sistemas pagados por generaciones de ciudadanos de los países asaltados.
Desde el punto de vista de la Guerra Pentagonista contra la Argentina, estos grupos han logrado una victoria muy importante al destruir nuestro Cinturón Energético, pues la Mafia Energética no sólo afecta a la provisión de fluido eléctrico y combustibles, sino a la provisión de insumos imprescindibles para la conservación de nuestros suelos, como el nitrógeno y otros mejoradores del suelo, además de insumos centrales para la industria química industrial.
Si bien los servicios energéticos se siguen prestando, a un costo excesivo y cuyos beneficios no se reinvierten en el país, el daño mayor consiste en la ruptura de la estructura de conocimientos (geológicos, tecnológicos, sociológicos, meteorológicos, etc.) que estaba integrada en las grandes empresas estatales como YPF, Agua y Energía, SEGBA, Aerolíneas Argentinas, etcétera, conocimientos que son imprescindibles para realizar cualquier planeamiento estratégico serio.
Si bien, una acumulación de poder político-electoral permitiría recuperar el control de estas empresas, la reconstrucción del know how que todas estas empresas almacenaban demandará décadas de trabajo arduo e inteligente. Reconstruir la totalidad del Cinturón Energético Argentino, y expandirlo a toda Sudamérica será la gran tarea liberadora en este siglo, puesto que el concepto de Cinturón Energético incluye a todas las formas de energía, naturales y fabricadas por el hombre, y los alimentos forman parte de este sistema, lo mismo que la preservación del medio ambiente.
Es un concepto que tiene aspectos territoriales articulados con los temas sectoriales mencionados.
Las Mafias Alimentarias constituyen una complejo sistema, que incluye el control de la generación de alimentos, en la cual se incluye a las Mafias Pesqueras, que son estructuras que ingresan también en la Globalización Alimentaria, depredando tanto los mares como los ríos del mundo, y secundariamente, generando graves enfermedades en la población, como la enfermedad de la Vaca Loca, generada por el aditamento de harina de pescado en la dieta de rumiantes, aparte de la destrucción de toda nuestra enorme riqueza ictícola fabricando esta harina que destruye indiscriminadamente a la fauna, o bien abriendo la puerta a las flotas altamente tecnificadas de otros países que han depredado la pesca de nuestra plataforma continental.
A estas se agregan las Mafias de Distribución Masiva, formadas por empresas procesadoras y distribuidoras de productos son las que instalan la realidad cotidiana de la calidad de vida de todos nosotros.
Tampoco es un secreto que son los intereses mafiosos los que manejan la actividad de los grandes mercados de distribución de productos frescos.
La forma de defender estos recursos y colocarlos al servicio de nuestro Pueblo, estos sistemas deben ser controlados por organizaciones comunitarias respaldadas por el poder del Estado, que debe protegerlas, usando la flota de mar para defender el recurso ictícola y las riquezas de nuestro lecho marino, y una legislación eficaz que controle el “Poder de las marcas” y las exageradas ganancias obtenidas por el sistema de intermediación.
Las Mafias de la Industria Química y de Medicamentos, tiene también un rol importante en nuestras sociedades, pues han distorsionado completamente la calidad del “Arte de Curar”, convirtiendo a la ciencia médica en un sistema de venta de medicamentos, donde los costos de la producción de los remedios son ínfimos comparados con los montos que esas mismas empresas destinan a la publicidad.
Se les atribuye en la Argentina una decisiva influencia para la destitución de un gran presidente, como fue Arturo Illia.
Además, la industria química es una de las industrias más contaminantes que existen, y se encuentra fuertemente entrelazada con la industria granelera (pues le provee de agroquímicos) y con la industria petrolera, de la cual provienen muchos de sus insumos.
En nuestro país ha pasado prácticamente desapercibido el apoderamiento imperial de nuestra industria química pesada, la fábrica de Soda Solvay, que funciona sigilosamente.
La Mafia Mediática es el dispositivo de superficie de la Guerra Psicológica que libra el Imperio Global contra la Humanidad en batallas cotidianas que se libran en la mente de todas las personas.
Este dispositivo incluye la Mafia Educacional y a los Servicios de Espionaje, en especial los asignados a los medios de comunicación.
La tarea principal de estas mafias es obtener una respuesta automática por parte de las personas a cualquier asunto que las afecta. La Mafia Educativa es la que prepara el sistema de pensamiento para asumir estas respuestas automáticas como verdaderas, la Mafia Mediática se ocupa de difundir los estímulos que provocan estas respuestas y los servicios de espionaje se ocupan de detectar y corregir a aquellos que no entran en esta verdadera “cárcel de la mente” que han diseñado los estrategas imperiales.
Como las otras mafias de superficie, estas deben ser “rentables”, o sea que deben generar sus propios recursos económicos, y para eso se ha inventado la “privatización” de la educación y el sistema financiación por las grandes empresas de los medios de difusión, mediante la propaganda, lo que ha dado origen a una nueva estructura imperial, la Mafia Publicitaria, que se ocupa de instalar masivamente modelos de vida acordes con las necesidades imperiales.
No es casual que prácticamente todas las agencias de publicidad importantes de la Argentina estén controladas por empresas cuyas sedes se encuentran en Estados Unidos o Inglaterra. Como colaboradores destinados al control “capilar” de toda nuestra sociedad, aparecen las Mafias Benéficas, destinadas a controlar el tráfico de personas, la defensa del medio ambiente y a establecer las políticas de Derechos Humanos favorables a los designios imperiales.
En este campo también operan las Mafias Religiosas, que son otro instrumento de penetración cultural del Imperio que tiene milenarios antecedentes. El nombre del Gran Enemigo del Poder, Jesús de Nazaret, es usado para imponer ideas totalmente contrarias a su prédica, ahora deformadas por los principios instalados por el Poder del Dinero, que ha estructurado estructuras más abiertas que la pirámide organizada por la Iglesia Católica, con lo cual logra una mayor penetración en las masas populares, contribuyendo a mantener ordenado el desorden generado por el Imperio.
La Mafia Judicial forma parte del sistema, a través de una operatoria del sistema legal (cualquier abogado le dirá que el 90% de la Justicia se basa en la buena aplicación del Derecho Procesal, no de la sabiduría d las leyes), así el actual sistema judicial está destinado básicamente a la protección de las cosas, y no instala una visión que incluya como prioritaria a la Justicia Social, que es la que debería regular su acción.
Dentro de este campo de la Mafia Judicial, la Mafia de los Escribanos es una de las más eficientes instaladas en la superficie del poder imperial, pues sin hacer absolutamente nada, se llevan una parte jugosa de cualquier transacción que requiera su participación.
Las Mafias Concesionarias o Mafias Contratistas se encuentran enquistadas en el sistema político vigente. La extranjerización de los Servicios Públicos ha sido catastrófica para el país, pues las poquísimas empresas con suficiente tamaño como para resistir la invasión neoliberal en los ´90, están de una manera u otra, vinculadas y dependientes de los intereses imperiales.
Muchas otras organizaciones de superficie que han surgido como instituciones para la defensa de los derechos del Pueblo, la perfidia imperial las ha impulsado a convertirse en estructuras mafiosas.
Eso se ha instalado en el sistema de los sindicatos (algunos forman parte ostensible del crimen organizado) y que conforman la Mafia Sindical, que no se ocupa de defender a los trabajadores, sino de controlarlos para que no desafíen al poder imperial o a sus socios locales.
El sistema de deportes masivos, mutado de diversión saludable a negocios gigantescos, también se ha “mafiasticado”, la Mafia del Futbol ya es una organización internacional, con su dirigencia eterna y sus grupos de choque (las Barras Bravas) asociadas a las Mafias Mediáticas que transmiten esos eventos por los medios masivos.
LAS MAFIAS INSIDIOSAS O ILEGALES
El Segundo Conflicto, fogoneado por los medios argentinos actualmente, se designa como “la Inseguridad”, ocupa los medios de difusión cuando el conflicto generado por las Mafias Graneleras se agota (la pelea Campo-Gobierno), y es entonces cuando la Mafia del Narcotráfico aparece en las pantallas televisivas destinadas a la información policial.
Sin que estos medios lo enfaticen jamás, detrás de todo hecho delictivo violento se encuentra el narcotráfico, sea porque las personas que delinquen necesiten dinero para comprar drogas, o porque actúan bajo el efecto de los estupefacientes.
El Narcotráfico no es otra cosa que la División de Baja Intensidad de la Guerra Química que el Imperio Global emprendió contra toda la Humanidad y los Estados que la componen.
La DEA no es sino otra división del Pentágono, encargada de someter tanto al pueblo norteamericano como al resto de las naciones.
Son pocos los países libres de esta lacra, y los que se han conservado así lo lograron tomando medidas muy drásticas, como la ejecución sumaria de todo narco traficante y penas severas para los consumidores.
Y de esas manera no se le permite ingresar a sus países al Comando Estratégico de la Guerra Química de Baja Intensidad, o sea a la DEA, cuya colaboración con la CIA (la agencia de espionaje y acción encubierta más importante de los Estados Unidos) es un hecho institucional, que transcurre dentro de sus embajadas.La jugada imperial de fomento del narcotráfico es muy inteligente, pues sirve a varios objetivos imperiales simultáneos: Destruye a la población, corrompe a las estructuras estatales, genera enormes cantidad de dinero en efectivo que sale del circuito legal y permite subvencionar a todo el sistema subversivo dentro de cualquier país, en especial a las estructuras que manejan el sistema electoral, y sirve para conectar y manipular a un tipo de agente de alto nivel: los Políticos Mafiosos.
En este campo podemos mencionar a una gran cantidad de funcionarios que realizan delitos estando en la función pública, muchas veces en complicidad con las Empresas Imperiales que en alguna (pocas en comparación con lo que realmente sucede) son acusadas de sobornar a directivos estatales.
Esta estructura revela la existencia de Mafias Estatales, o sea de grupos de personas que realizan actividades económicas ilegales en complicidad con terceros.
Una de las mafias más institucionalizadas es la Mafia Aduanera, de la cual surgen esporádicamente nuevos escándalos, o los pagos irregulares a empresas que suelen llenar semanas de noticias antes de apagarse.
Por otra parte, las actividades delictivas tradicionales como el juego y la prostitución se han convertido en prósperos negocios legales, con ciudades enteras dedicadas a ellos, como por ejemplo, Las Vegas, Meca del ideario de vida del Imperio Norteamericano, un imperio sin gusto ni arte, lleno de luces artificiales, controlado por tahúres y proxenetas, cuyo mirón más sagaz está representado por un grupo de investigadores de la morgue , dignos observadores del Partido de la Muerte.
Buenos Aires, en la Semana Santa de Abril de 2009

OBAMA EN EL G20


Crisis con más pedidos de ayudas al exterior pero sin soluciones concretas.

Sin autocrítica y con impunidad para los culpables del descalabro a nivel planetario, con una delegación de más de 500 miembros, en medio del mayor desprestigio internacional de EEUU y su liderazgo cuestionado.


Por Enrique Oliva (31 de Marzo de 2009)

Con promesas de una nueva política, sin un principio de gestos reales ni medidas de cambio verdadero, llega a la cumbre de Londres del G20 Barack Obama, solo con palabras que intentan emocionar.

Latinoamérica está harta de falsas ilusiones y es hora de recordar duras experiencias para no repetirlas.

Solo burlas en el descuidado patio de atrás.

Prometer para mañana y exigir hoy.

Sin ir más lejos, durante la segunda presidencia de Agustín P. Justo, creyendo éste en los galanteos de Franklin Delano Roosevelt, lo recibió como a un salvador en Buenos Aires, oportunidad en que su hijo Liborio Justo gritó en la cara del visitante: ¡Muera el imperialismo!.

Sus propuestas vacías, que han sobrepasado los tres cuartos de siglo, no se diferencian en nada a las actuales de Barack Obama.

Pocos meses antes de la muerte de Roosevelt, que sería reemplazado por el nefasto Harry Truman, la Reserva Federal (FED), manejada por banqueros privados, impuso al mundo, en una reunión de solo 44 países de gobiernos cómplices, los llamados acuerdos de Breton Woods, una de las tantas estafas periódicas a las finanzas internacionales.

En época de Arturo Frondizi arribó a Buenos Aires Dwight Eisenhower y se repitió la misma burla.

Nada entre dos platos, a pesar de que el yanqui en los últimos tiempos del presidente Juan Perón, había designado a su hermano, Milton Eisenhower, como su delegado personal para negociar nuevas políticas.

Milton Eisenhower celebró varias entrevistas con Perón y ponderó al justicialismo por tener una CGT fuerte y única, representativa de los sentimientos de los trabajadores argentinos nacionalistas.

Ni comunistas, ni nazis, cualidad no poseída por los demás movimientos obreros del continente.

John F. Kennedy, pintaba bien para Latinoamérica y prometió una muy publicitada Alianza para el Progreso, que en 10 años, dotaría con una cifra millonaria en dólares.

Quizás a causa del asesinato del mandatario (por intentar quitarle privilegios a la FED), todo quedó en nada.

Caminando en 1965 con Eduardo Víctor Haedo, ex presidente del Gobierno uruguayo, por el parque de La Azotea, su residencia en Punta del Este, quien había participado del lanzamiento de la famosa Alianza de Kennedy en la misma ciudad, narró una anécdota de aquella reunión.

Fuimos testigos de la misma José Maria Rosa, yo y nuestras respectivas esposas, Colita Roca y Techa Moresi.

-Junto a este árbol -contó Haedo- el Che Guevara me dijo: -Esta alianza no llegará a nada. No le crea a los políticos yanquis, son unos hijos de puta.

George W. Bush, durante la campaña para su primera presidencia, para ganarse el voto latinoamericano, prometió el oro y el moro y hasta cumplió su compromiso de visitar México en cuanto iniciara su mandato.

Desde el país vecino repitió su intención de privilegiar la cooperación con el resto del continente.

Pero el yanqui prefirió lanzarse a la aventura de manotear petróleo y gas a sangre y fuego en Afganistán e Iraq, que lo sumergió en una ciénaga.

Tan es así que Obama hace planes para 10 años de ocupación de Afganistán, para organizar su democracia y sigue enviando más tropas reclamando lo mismo a sus aliados rezongones por los rechazos que sufren ante sus electores.

Ahora Barack Obama se encuentra en un tembladeral peligrosísimo.

Su frente interno se deteriora día a día por el crecimiento del desempleo y los millares de familias puestas a diario en las calles por sus hipotecas imposibles de pagar.

Ni qué decir de la situación imperante en Europa donde crecen las multitudinarias manifestaciones de ira callejera, haciendo temer graves disturbios, incluyendo vandalismo y saqueos.

La corresponsal de Clarín en Londres, este martes 31 muestra un sombrío panorama de la capital inglesa: comercios de lujo cubren sus vidrieras para protegerlas de posibles ataques.

¿Advertirá Obama que el clima reinante en el viejo mundo no está para discursos con promesas sin concretos inmediatos?

A ellos se van sumando también los pueblos del patio de atrás.

¿Nadie imagina lo que podría ocurrir en las grandes ciudades europeas y americanas sumidas en un caos generalizado?

Bill Clinton fue muy popular hasta que en su segundo mandato intentó sin conseguirlo hacer pasar una ley limitando y controlando la tenencia de armas existentes en número mayor a la cantidad de habitantes.

Cayó en tal desprestigio, que su Partido Demócrata perdió el poder, cayendo en el republicado George Bush (h) dejando a EUU al borde del colapso.

Más de un millonario de los tantos que residen en Los Angeles, ciudad calificada hoy capital de los indigentes (llaman así a los sin techo) debe desvelarse pensando en los 73.000 que duermen en las veredas y bancos de plazas.

¿Y si algún día, sin nada para perder, se unen a manifestaciones de desocupados también con punzantes carencias y con mal humor?

¡Meditemos!

¡VAMOS ARGENTINA, CARAJO!


La Argentina se desprende de factores centrales de la dependencia imperialista.
Por Walter A. Moore

El Imperio se está cayendo, y de la peor manera.
El lapidario comentario de uno de sus economistas más brillantes, Paul Krugman, que en el New York Times (1) opina con un titular: “EE.UU., el Madoff de la economía mundial”, o sea el país que ha estafado a todo el planeta, nos prueba que a pesar de los patéticos esfuerzos de su presidente zurdo, el sistema no tiene arreglo, diga lo que diga la CNN.
La debacle del dólar es cada día más inminente, y el poder de Estados Unidos se sustentó siempre en el dólar, material con el construyeron su “tigre de papel”, de papel moneda, claro.
En este proceso de darle enérgicos empujones hacia el abismo en que merecen caer, el gobierno argentino ha dado pasos muy importantes.
Primero fue en nuestro país donde se le arruinó su estrategia para imponernos el ALCA, en el heroico evento de Mar del Plata, donde el psicópata de Bush fue desairado como jamás esperó.
Después eliminaron el dólar como moneda de intercambio con nuestro principal socio comercial, el Brasil. Un ejemplo que pronto, con seguridad, será imitado por muchos países latinoamericanos y no latinoamericanos.
El tercer golpe fue más fuerte. Al hacer un convenio con la República Popular China por el cual, su moneda empieza, en los hechos, a conformar una parte importante de nuestra reserva monetaria.
Es siniestro que los adulones de siempre titularan: “China pone a disposición de la Argentina US$ 10.200 millones”, cosa que es mentira. China aceptó intercambiar 37.000 millones de pesos argentinos por 70.000 millones de yuanes, que al precio superinflado de los dólares de hoy, equivale a esos 10.200 millones de dólares. Comparación que lo único que demuestra como el periodismo cipayo trata de edulcorar la caída de sus amos imperiales, porque, insistimos, no hay ningún dólar implicado en esta operación, que es una operación entre nuestra moneda y la moneda china.
La Argentina así, se ha convertido en el sexto país en el mundo, y el primero de todo Occidente, que acepta comerciar con china sin utilizar dólares para nuestro intercambio.
Ese es un mensaje que nadie puede dejar de tomar en cuenta, sobre todo en la antesala de la Cumbre del Grupo de los 20 (que hasta hace muy poco eran los ricos del G7+1 que era Rusia). Reunión básicamente mediática, porque como siempre, los del G7 ya decidieron que es lo que nosotros tendremos que firmar, imaginando que se encuentran montados en un caballo que ya no tienen, y del que caerán muy pronto.
Pues tras la caída del dólar vendrá la de un euro cada vez más débil y con ello el desplome de una Unión Europea que no tuvo, no tiene, ni tendrá, otra consistencia que la unión monetaria, y al derrumbarse su moneda, no quedará nada. Así que en un futuro muy cercano, volveremos a tener que tratar con todos los países por separado, como siempre ha sido, y será usada entonces una moneda nacional contra otra moneda nacional, fue así y seguirá siendo así.
Festejemos, la Gran Estafa euronorteamericana está llegando a su fin.
Y como frutilla de un postre en el cual la Argentina tuvo un papel descollante, tanto en las reuniones de Chile, que convalidó sus títulos de país colonial, convocando mediante una extraña convocatoria a “Los líderes progresistas”, a la cual invita a una potencia colonialista (ahora en decadencia, pero sin abandonar sus pretensiones) como Gran Bretaña, a cuyo premier se le pusieron los puntos sobre las íes. Los medios cipayos casi no informan sobre lo que ha sucedido en la reunión cumbre de Qatar, entre mandatarios sudamericanos y de los países árabes, “destinada a fortalecer los lazos económicos entre los dos Bloques”, y donde en forma unánime se repudió la masacre realizada por las fuerzas armadas israelíes en Gaza.
Así, toda esta actividad en el campo internacional quedó coronada por la expulsión de las delegaciones militares de los Estados Unidos de los edificios del Comando de Defensa, de la Armada y de la Fuerza Aérea (2).
En otro momento podemos analizar todo lo que no se hace y lo que podría hacerse, pero en este momento lo único que podemos decir es:
¡VAMOS ARGENTINA, CARAJO!

Buenos Aires, 31 de marzo de 2009
(1) Publicado el 31/3/09 tanto por La Nación (pag.3) como por Clarín.
(2) Ver Ámbito financiero del 31/3/09, pag. 28